Con la magia que extiende sus garras por las
fronteras del reino de Arturo, el emblemático mago Merlín tiene una solución:
decide enviar a Ginebra para que se convierta en la esposa de Arturo, para que
pueda protegerlos de aquellos que buscan la caída de la ciudad que gobierna el
joven rey. ¿Cuál es la trampa? El verdadero nombre de Ginebra. Su identidad
verdadera. Nadie la conoce realmente. Ella es una sustituta, una joven que ha
sacrificado todo para salvar Camelot. Para mantener a Arturo a salvo, Ginebra
debe abrirse camino en una corte donde los antiguos residentes, incluida la
misma familia de Arturo, quieren que las cosas continúen siendo como siempre, y
los nuevos, aquellos atraídos por el sueño de Camelot, luchan por una vida
mejor. Y siempre, en el corazón verde del bosque y las negras profundidades de
los lagos, la magia espera al acecho para reconquistar el reino. Justas
mortales, falsos caballeros y romances prohibidos no pueden compararse con la
amenaza más grande: la joven de largo pelo negro que cabalga a través de la
foresta oscura hacia Arturo. Porque cuando toda su existencia es una mentira,
no es posible confiar ni siquiera en uno mismo.
Tras la expulsión de Merlín del reino de
Camelot, Arturo ha levantado de sus cimientos una ciudad limpia, segura y,
sobre todo, libre de magia.
Cuando el anciano mago percibe un peligro
inminente que pondrá en riesgo la vida de Arturo y todo lo que ha construido,
decide enviar a su hija a desposarse con el rey, de ese modo, la magia entrará
sin sospechas en el reino, y la nueva reina podrá proteger a Arturo de
cualquier amenaza.
Adoptando la identidad de Ginebra, la joven
viaja hasta Camelot para cumplir su cometido: ser la reina y proteger a Arturo
a toda costa. El problema es que cuando comienza sus investigaciones para
encontrar la amenaza que Merlín ha predicho, se da cuenta de que no juega con
toda la verdad en sus manos y hay mucho que no sabe sobre la extraña misión que
le han encomendado.
Algo acecha a Camelot desde lo profundo del
bosque, y solo Ginebra podrá descubrirlo y luchar contra ello para defender a
su rey y cumplir su destino.
Amistad, diversión, mentiras, trampas, traición
y amor, nos acompañan en esta historia de fantasía medieval que nos hará ver a
Camelot, Arturo, y sus caballeros, de un modo muy diferente.
Holi, holi!!!!!
Hoy os traigo la reseña de un libro que tenía
muchísimas ganas de leer.
Aunque hace poco comenté en otra reseña que los
libros ambientados en épocas pasadas no suelen gustarme, este es un libro de
fantasía, y para la fantasía todo vale…
Es la primera novela que leo de la autora, y
aunque sé que tiene varios libros ya publicados en español, este en concreto me
llamaba la atención y decidí comenzar por él. ¡Bien! Mal.
Mal, porque resulta que este libro es el
primero de una trilogía y aquí una servidora no lo sabía (debí hacer caso a mi
voz interior, esa que me recordaba que casi nunca son tomos únicos). Mal,
porque después de enfadarme conmigo misma por no mirarlo antes, he descubierto
que la segunda parte no se publica hasta noviembre de este año, y ni idea de
cuando saldrá a la venta en español. Y mal, porque la tercera parte y (en un
principio) desenlace, ni siquiera tiene fecha ni portada. Lo siento, esto para
mí es un DRA-MA porque odio quedarme a medias con las historias….
En fin, sin más rollos, ¡vamos al lío!
La primera parte del libro me ha resultado un
poquito pesada, ahora que sé que es el primero de una trilogía, esto tiene toda
su lógica, porque durante el comienzo principalmente nos metemos en este nuevo
Camelot y conocemos su modo de vida y costumbres a través de los ojos de
Ginebra. Cómo ascendió Arturo al trono y cómo gobierna esta ciudad para conseguir
que sea un reino envidiado en el resto del mundo. En la primera mirad, la
autora nos presenta el mundo que ha creado para esta historia tomando como base
todo lo que hemos leído y escuchado a través del tiempo sobre la cuidad y su
rey. El libro está muy bien escrito, cuidando cada detalle hasta el punto en
que casi puedes sentirte paseando por esas calles junto a los personajes.
La narración es siempre desde el punto de vista
de Ginebra en primera persona, y aquí me hubiera gustado mucho mucho mucho
tener capítulos narrados por otros personajes, y no solo Arturo… Mordred, el
primo de Arturo y caballero, me ha resultado un personaje muy interesante,
siempre vigilando, siempre atento a todo, y siempre con un ojo en Ginebra.
Después de leer el final de la historia, me hubiera encantado saber más de él.
Brangien, la dama de la reina que rápidamente se convierte en amiga, también me
ha gustado mucho, oculta sus propios secretos y cuando se han descubierto, me
ha gustado todavía más. Por supuesto, Arturo, me hubiera gustado leer su punto
de vista también, porque básicamente se pasa medio libro viajando y apenas está
presente en la corte con Ginebra, por lo que vemos un poco de él aquí y allá,
pero no hay una gran presencia de su personaje más allá de ser el rey de
Camelot e intentar ser justo, noble y de buen corazón en todo momento. A pesar
de no estar alrededor todo el rato, sí es más que evidente el cariño y afecto
que tiene por Ginebra, aunque nunca he llegado a verlo como amor. No esperéis
un gran romance, no lo hay, por lo menos en esta parte, aunque obviamente sí que comienza a fraguarse. Y, por último, el
caballero Parches, no puedo nada más que decir que me ha encantado, totalmente,
y también me hubiera gustado leer algo desde su perspectiva (no puedo decir
mucho más sin hacer spoiler). La lealtad de todos ellos a Camelot y sus reyes
es evidente en cada momento de la historia, así como la del resto de caballeros
de la guardia real.
Como comentaba, la primera parte del libro se
me hizo un poco lenta, pero a partir de la mitad aproximadamente ha sido un no parar.
Según va avanzando la historia conocemos un poco más de Ginebra, que no es
Ginebra para nada, pero también comienzan a surgir un montón de preguntas más,
algunos personajes se quitan la máscara y la magia empieza a aparecer de
verdad. He devorado el final como si no hubiera un mañana y el resultado ha
sido… raro. Quiero decir, la historia me ha gustado, mucho, pero he terminado
con más preguntas que respuestas y con un final demasiado abierto, vamos, que
el próximo libro promete ser muy movidito según han quedado las cosas. Me ha dejado con ganas de más y más (es por eso que
procuro no leer libros que tienen continuación si no está publicada ya).
He
disfrutado mucho de la historia y no me arrepiento de leerla… solo estoy en modo
drama porque me toca esperar.
Si te gusta la fantasía y los retelling, este
libro te va a encantar.
Sin ninguna duda leeré la continuación y, si
tengo la oportunidad, voy a leer algo más de la autora, porque definitivamente
me ha encantado como escribe y crea la historia.
Aquí ha conseguido una fan más.
¡Gracias!
¡¡Nos leemos pronto!!
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